A inicios de este año, la empresa ya estimaba producir unas 500 hectáreas de tomate y las 1.000 restantes divididas entre maíz, avena, cebada y alfalfa. Por eso, la picadora JAGUAR que permite procesar la más amplia gama de cultivos, fue equipada con dos cabezales: un DIRECT DISC 610 y un ORBIS 600, que es la última novedad en la materia y se destaca por un mantenimiento sencillo de 250 horas de intervalo de servicio y un plegado en tiempo récord de tan solo 15 segundos.
En el ORBIS, la combinación de platos de alimentación pequeños y grandes permite un rango de uso variable en cultivos que ofrecen un rendimiento extremadamente elevado. A su vez, por su forma de construcción que trabaja paralelo al suelo permite obtener un corte uniforme, de alta calidad, con rastrojos muy cortos y homogéneos en todo el ancho de trabajo. A su vez, gracias al ángulo de montaje plano se puede trabajar a alturas de corte de 80 mm como mínimo.
Con la JAGUAR lista en el campo, la empresa se propuso también brindar servicios a campos vecinos de hasta 70 kilómetros a la redonda que comenzaron a abastecer de alimento al feedlot de los Fera con las partidas de maíz y otros cultivos usados en la rotación de sus fincas de tomate. Para llevar adelante la tarea pusieron mucho énfasis en capacitar a su equipo de tractoristas, premiados en cinco ocasiones por su trabajo en las fincas. “Creemos que es fundamental que nuestra gente se prepare, no solo para trabajar con nosotros sino para poder ir siempre formados a buscar otras oportunidades”, agrega.